Hombre, 20 años, desde España:
Mi nombre es Ivan, y me pongo en contacto con ustedes por un gran problema que me afecta. Bueno, no solo me afecta a mi, sinó a una decena de personas ya!! Llevo dos meses con una «infección» en mi tatuaje, os adjunto fotos para poder observarlo. Resulta que mi dermatologo no tiene ni idea que es lo que nos afecta, pues como el mismo ha reconocido, no es experto en tatuajes. Despues de haber consultado a los tatuadores del estudio que realizo los tatus, y otros de mi zona, hemos llegado a la conclusion de que el culpable fue la tinta. Ya que las demas personas afectadas, solo tuvieron dicha reaccion en esa tinta. (black onix, night shadows, Millenium colorworks Inc.)
Hago esta consulta […] por si me pudiesen aportar algun tipo de informacion sobre el tema. Tanto de infecciones en tatuajes como sobre la tinta antes mencionada, ya que cualquier ayuda es poca al respecto. Pues de momento damos palos de ciego. Una de los afectados incluso tuvo que ser ingresada por una reaccion urticante, la cual se extendio desde el pie(donde se localiza su tatuaje) hasta la espalda. Hoy en dia, depues de 3 semanas se encuentra mejor, pero todavia no curada. Y el resto de la gente afectada seguimos igual.
El Dermatólogo responde:
En los últimos años los Dermatólogos estamos siendo frecuentemente visitados por pacientes que padecen cuadros clínicos de dermatitis alérgicas o eczemas inflamatorios tras la realización de un tatuaje cutáneo.
Distintos Departamentos Universitarios de Dermatología y Alergia han investigado científicamente acerca del tema que nos ocupa y sus conclusiones finales evidencian una serie de patologías asociadas, entre las que señalaremos alergias «de contacto» a determinados materiales metálicos o vegetales utilizados en los «tatoos» (derivados del niquel, cromo, cobalto, cadmio, óxido de hierro, óxido de zinc, titanio, niobio, henna,…), eventuales complicaciones secundarias a estas maniobras, como sobreinfecciones bacterianas locales por contaminación instrumental o infecciones de mayor severidad como hepatitis B/C, tuberculosis cutánea o VIH.
Creo que, al igual que nos está ocurriendo con la moda del superbronceado cutáneo y su relación con la patología tumoral por sobreexposición solar, los tatuajes y piercings decorativos deberían someterse a unas medidas de control higiénico-sanitario mucho más exhaustivas y severas por parte de las autoridades sanitarias pertinentes.
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