Mi hijo tiene siempre la cabeza irritada
Olivia de Costa Rica:
Le escribo para decirle que mi hijo de 12 años siempre se queja de picor en la cabeza y tiene irritado y caspa a veces. Qué me aconsejaría?
El Dermatólogo responde:
La dermatitis o eczema seborreico es un trastorno frecuente de la piel que causa manchas escamosas, piel enrojecida y caspa. Principalmente afecta al cuero cabelludo pero también puede encontrarse en otras zonas grasas del rostro, como los lados de la nariz, las cejas, las orejas, los párpados y la zona media del pecho o la espalda. Su evolución crónica suele tener carácter recurrente (mediante brotes) por lo que a veces desaparece sin tratamiento para reaparecer al tiempo después. Esto la convierte es un condición particularmente frustrante para el paciente, requiriendo de éste especial perseverancia y constancia con el tratamiento.
La dermatitis seborreica puede presentar diversas formas e intensidades, desde una caspa más o menos persistente hasta brotes intensos de placas o parches escamosos e irritados. En bebés, se manifiesta con parches secos y escamosos en el cuero cabelludo que se denomina costra láctea.
Aunque todavía se desconoce la causa exacta de la dermatitis seborreica, parece estar influenciada por una serie de factores:
- ejercicio físico intenso
- ciertas comidas sazonadas
- estrés emocional
- consumo de tabaco y bebidas alcohólicas
- ciertas medicinas ( especialmente psicofármacos).
- herencia ( con predisposición a una respuesta irregular del sistema inmunitario)
- parasitación intensa de hongos Malassezia furfur que pueden colonizar de forma equilibrada y asintomática el folículo pilosebáceo.
Los tratamientos mas habituales se enfocan en los siguientes frentes:
- Cremas, champús o ungüentos que controlan la inflamación. Formulados con corticoesteroides como hidrocortisona, fluocinolona, el clobetasol o la desonida. Llegan a ser efectivos y son sencillos de aplicar, pero requieren precaución, un uso prolongado y sin supervisión médica puede provocar cierta atrofia o adelgazamiento de la piel o pigmentaciones (manchas) sobre todo en el área facial.
- Cremas que contienen inhibidores de la calcineurina (enzima responsable de la respuesta inmunitaria) como el tacrólimus o el pimecrólimus, terapias que pueden resultar efectivas evitando los efectos secundarios de los corticoides, pero que debido a su elevado precio. No suelen ser tratamientos de primera opción.
- Geles, cremas o champús antifúngicos alternados con otros derivados como el ciclopirox olamina, el zinc piritione, el ácido salicílico o el TAR.
- Medicamentos antifúngicos por via oral. Indicados en casos muy intensos, particularmente recurrentes o refractarios a la terapia local.